Dos errores gravísimos nos lastraron muchísimo.
La perdida de Montiel, nos costó el gol, y la expulsión de Jordan, la posibilidad de luchar por la clasificación.
Desde primer momento se veía que está Champions no tenía muy buena pinta, todo torcido.
Y Pepe debería hablar con su amiguisimo Ceferin, porque los seis arbitrajes que hemos sufrido han sido una puta mierda.