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#Alavés vs. S.F.C.
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Si no me equivoco, creo que los que están sin contrato se pueden fichar en cualquier momento del año...De hecho creo que fue el Zaragoza quien fichó así hace un par de temporadas a uno o dos jugadores sin mediar lesión.
Es una gilipollez fichar a un central más para mes y medio. O sé ficha a un centrocampista de verdad, o se agunta hasta que se recuperen Pareja, Carrizo y Don Federico julian fazio.
Mientras el mercado ha respondido a las ideas preconcebidas que nuestros dirigentes tenían a principios de junio, las decisiones se han tomado con cierta coherencia. Pero claro, eso pasó hace un mes y a los que mandan se les olvidó que todavía quedaba mucho tiempo para cerrar el mercado. En cuanto el mercado se ha desatado, la Dirección Deportiva ha pecado de improvisación, poco trabajo y escasa capacidad de reacción.Yo creo que la película es más o menos ésta:A principios de junio, el Sevilla necesitaba vender como fuera a Negredo para atenuar la alarmante situación económica por la que atravesaba. La intención era vender a Negredo y, a ser posible, también a Navas y a un tercer espada (tipo Medel o Fazio). Con la primera venta se taparían agujeros y con las otras dos se intentaría lavar la cara al equipo que había fracasado estrepitosamente por segunda temporada consecutiva.El primer gran impulso llega con la venta de Navas. Yo estoy convencido de que Del Nido pensaba que iba a ser muy difícil colocar a Jesús por un precio acorde a lo que la afición estimaba correcto. Jesús era el niño mimado del sevillismo, pero su valor de mercado no estaba en consonancia con ese cariño, tanto por sus problemas de ansiedad en el pasado, como por el hecho de que es un jugador de ataque peleado con el gol. Navas era una patata caliente para Del Nido, por lo que el día que a Pelegrini se le mete entre ceja y ceja el fichaje del palaciego, a Del Nido se le hacen los ojos chiribitas. Se vende pronto y se aprieta poco, no vaya a ser que el jeque se cabree.Si la venta de Navas supera lo esperado, no digamos ya la de Luis Alberto. 8,5 millones por un jugador que casi no había debutado en primera es mucho más de lo que Del Nido y Monchi podían imaginar. En apenas unos días y de forma inesperada, el Sevilla cuenta con dinero para rearmar el equipo sin necesidad de vender a su columna vertebral en el centro del campo (siempre contando con la posterior venta de Negredo, que sí era un valor bastante estable en el mercado). Se producen entonces los fichajes que tanto ilusionan (Vitolo, Jairo, Pareja, Bacca, Gameiro...) y que suponen aire fresco para el equipo fracasado de los últimos tiempos. Hasta ahí, todo marcha sobre ruedas. Economía saneada y equipo nuevo, joven e ilusionante. No se puede pedir más. Pero claro, queda un mes para el cierre del mercado y eso, parece, no lo tenían previsto nuestros dirigentes, ajenos a los caprichos de multimillonarios árabes, rusos o malayos. Llega una oferta fuera de mercado por Medel y la Dirección Deportiva empieza a tambalear. La impresión es que Monchi recurre a su libreta del Plan A, la misma de principios de junio cuando las circunstancias eran otras y que solo contiene nombres de jugadores semidesconocidos o que puedan llegar cedidos. Evidentemente, no hay Plan B. Hay dinero, mucho más de lo que Del Nido y Monchi podían imaginar, pero no hay trabajo hecho para esta nueva situación. Falta cintura para adaptarse al cambio y se empiezan a dar palos de ciego. Se va a la desesperada por Iborra, un jugador que se rescata de la libreta pero que acaba resultando tan caro como otros jugadores mucho más contrastados a alto nivel. Y para culminar, lo de Kondogbia, por el que se ingresa más dinero pero al que le sustituye otro cedido que fue pretendido también cuando las arcas estaban tiesas.En resumen (perdón por el tocho): decisiones coherentes cuando todo respondía a lo planificado en el Plan A, y poco trabajo, nula previsión y escasa capacidad de reacción cuando los multimillonarios malayos y rusos decidieron poner sus ojos en Medel y Kondogbia.A día de hoy, no tengo claro si tenemos mejor o peor equipo que el año pasado.
En resumen (perdón por el tocho): decisiones coherentes cuando todo respondía a lo planificado en el Plan A, y poco trabajo, nula previsión y escasa capacidad de reacción cuando los multimillonarios malayos y rusos decidieron poner sus ojos en Medel y Kondogbia.A día de hoy, no tengo claro si tenemos mejor o peor equipo que el año pasado.
A día de hoy, no tengo claro si tenemos mejor o peor equipo que el año pasado.
Si aguantáramos sin los tres centrales durante 2 o 3 meses, estaríamos en la 2ª División a final de año.Ahora se necesita un centrocampista y cómo mínimo un central. Cuándo se recuperen los tres centrales el qué no juegue que se aguante, pero el qué no puede aguantar ahora es el SEVILLA.
Coño Gabriel, por tu contestación en otro hilo pensaba que no estabas de acuerdo con la opinión de que la planificación, y por ello la plantilla, está inacabada y desequilibrada, y ahora compruebo que estás de acuerdo en las carencias evidentes que hay.
Home, si no hubiera 5 bajas de larga duración y una salida o dos no previstas, la planificación hubiera sido casi perfecta y no lo digo yo, lo dicen casi todos los foreros dos o tres semanas para atrás.P.D. hay que mirar el momento actual y en el qué estamos ha variado la situación anterior, por lo qué la planificación definitiva ya no puede ser la misma que hace dos semanas.
No si al final viene el centrocampista ofensivo antes que el central.Yo si tuviera que elegir, fichaba al centrocampista, lo veo mas vital y necesario con la configuración actual de la plantilla. Y mas cuando el presidente ha dicho que Pareja esta acortando plazos.
Asturiano, es que el problema es que las cosas se torcieron hace 2 o 3 semanas, y se ha reaccionado mal. Digan lo que digan, la salida de Kondogbia era previsible, antes y despues de la salida de Medel. Los fichajes de Iborra y N'Bia son poco meditados y redundantes. Que DN diga que éste último viene a sustituir a kondogbia denota, o que no se entera o, peor, que en el Sevilla se ha caido en la improvisación total.