Un cateto entra en la farmacia del pueblo y ve que han puesto una máquina de diagnosis automática.
-Quillo, ¿cuanto cuesta un diasnóstico lestrónico desos?
-Veinte pavos, Maoliyo... compra la ficha si quieres hacerte uno...
El cateto compró la ficha y se la echó a la máquina; salió un brazo articulado con un bote y un papel que decía; ''Diagnóstico automatizado; deposite so orina en el bote y apriete el botón negro''... así lo hizo el cateto y la máquina, tras unos segundos, sacó de nuevo el brazo articulado con un papel-diagnóstco... ''Se llama usté Manuel y le apodan ''El Cagüendiós''; cumplió usté 52 años el mes pasao y su estado de salus es bueno si no fuese por una lesión en el codo derecho que, a la larga, le va a costar perder el brazo''...
-¡Cagüendiós!- gritó el cateto... -me parece que la máquina ésta lo sabe tó-...
Se fue a su casa el cateto, cogió un cubo y le echó medio litro de aceite quemao del tractor; llamó a su mujer y a su hija de 18 años y las hizo que mearan en el cubo; se la cascó, echó la leche en el cubo y se fue pa la farmacia a pedir otra ficha pa la máquina... cuando salió el brazo articulado, echó el mejunje en el bote y esperó a que saliera el nuevo diagnóstico...
''Su tractor Ebro tiene un cilindro calado, Manuel; su hija Mariquilla está preñada de cuatro meses y no sabe quien es el padre; su mujer la Paqui está algo pachucha de tanto trabajar la pobre... lo único preocupante es que su lesión del codo derecho se ha agravado porque debió uste cascársela con la zurda, como ya le advertimos antes''.