Vicente IBORRA

[Hispalensis]

Muchas gracias

[Juank]

Muchas gracias por los servicios prestados. A ti si deberian abrirte la sala de prensa para decir adios.

[MASTERMIND MORTAJER]

Se marcha un Señor que sólo deja en Sevilla una admiración absoluta, un respeto enorme, un montón de amigos, tres títulos en nuestras vitrinas y un montón de millones en la caja. Casi nada.

Toda la mejor suerte del mundo, capitán. Aquí tendrás siempre tu casa y a tus fieles. Gracias por todo y hasta pronto, tío grande.

[GUGAR]

Adios Capitan con mayusculas toda la suerte del mundo en tu nueva aventura para ti y para tu familia ,sin ser sevillista de nacimiento ya te considero uno de los nuestros

[Sevillista de San Jeronim]

Te esperamos de vuelta algun dia a esta que es tu casa, Gracias y hasta siempre Capitan.

[Líder Alfaro]

Me invade la tristeza por su marcha pero si el lo ha pedido  ...a sus ordenes Capitán.  Gracias por estos maravillosos años. Estarás siempre en el corazón de todos los que amamos estos colores. HONOR a uno de los mejores.

[SliM_SFC]

El club llevaba tiempo con ganas de venderlo.
Ha asumido su papel de suplente y ha peleado por el puesto, dandolo todo cada vez que se le ha necesitado.
Yo lo hubiese vendido el año pasado, porque lo que ofrecen por el es mucho para un suplente. (aqui es suplente, importante pero suplente).
Buena venta, aunque se nos va un suplente de autentico lujo.
Gracias por todo y te deseo lo mejor porque te lo mereces.

[anonimo_sevillista]

Suerte en todo capitan, vuelve cuando quieras que aquí tienes tu casa.

[jesulinervion]

 

[UefaSFC]

Tienes abiertas las puertas del Sevilla.

Jugadores como tú, honrados, con total entrega y defensa de su equipo es lo que quiero yo para mi Sevilla.

Suerte en Inglaterra, Don Vicente

[gordon]

HONOR

[Si o Si]

Un tío que se viste por los pies en el vestuario, en el terreno de juego, en los despachos y en su vida privada!!!

Se nos va el hombre invisible... Ese que desde que llegó no tenia cabida en el equipo pero que siempre jugaba un enorme número de partidos cada temporada, ese que cuando él participaba menos veces perdía el equipo, el que mejoraba sus estadísticas personales cada año que pasaba, y sobretodo el pilar del vestuario!!

Mucha suerte DON VICENTE, espero que vuelva algún día al club para ocupar un puesto de relevancia porque con la personalidad que ha demostrado seguro que lo hará usted de maravilla....

PD: A ver quien va a coger ahora de la pechera al cani de camas cuando este trate de vacilar a la afición sevillista, eres muy grande hombre

[er_socio]

Grande Iborra, suerte allá donde vayas!!!

[SNM]

Uno de los nuestros. Mucha suerte y vuelve cuando quieras.

[Líder Alfaro]

Mucha suerte Capitan..te echaremos de menos.

[Itoferiche]

Tu marcha junto a la de Coke han sido las ventas que más dolor me han producido.
Pocas personas me trasmiten ese sentimiento de "fútbol real". El de darlo todo y también quererlo pero sin ser egoísta pensando en el equipo.
Siempre  dando la cara, defendiendo a los tuyos. Y sin ninguna queja, jugando de delantero, mp, mc, mcd, def y creo que hasta de portero si no me equivoco.

Muchas gracias Don Iborra, eternamente agradecido

[inri]

Dejo el artículo de Félix Machuca sobre Iborra. Qué bien escribe este tío.

http://sevilla.abc.es/deportes/orgullodenervion/opinion/la-opinion-de-felix-machuca/fue-honor-pelear-lado-126795-1499327636.html

Fue un honor pelear a tu lado
Vicente amaba al Sevilla hasta sangrar por su compromiso, por su lealtad y por su militancia
Por FÉLIX MACHUCA, 6 de julio de 2017 9:53 h.

Cuando me enteré de su marcha a Leicester, precisamente a Leicester, la tierra media donde Sampaoli perdió la brújula y entramos en depresión cuando más bulerías teníamos en la cabeza, me pregunté con curiosidad: ¿qué carajo sentirá Vicente Iborra cuando se ponga esa camiseta azul, ese paño que lo fue de las lágrimas europeas del sevillismo? ¿Qué puede sentir un soldado como Iborra colocándose el uniforme del equipo que nos mandó a la venta y al cuarto de los locos por unos cuantos partidos? Me quedo con la curiosidad. Y también con aquella certera frase de Chesterton. En la que venía a decir que el verdadero soldado no lucha porque odia lo que tiene delante, sino porque ama lo que tiene detrás. Y Vicente amaba al Sevilla hasta sangrar por su compromiso, por su lealtad y por su militancia. En esos costados llevaba su amor al escudo, a la bandera y a la afición. Hasta dar la impresión de que no había nacido en tierras levantinas. Sino que era más sevillano que un lunes de pescaito o la calle Feria. Se hizo sevillano sintiendo y peleando por el Sevilla. Vino del este. Y se consagró en el suroeste de la Península convencido de que se puede nacer en muchos sitios, pero solo unos pocos pueden tener el privilegio de ser de Nervión. Fue un honor pelear a tu lado. Ganar o perder teniéndote de capitán. Señor, sí señor…

A esta clase de jugadores, que no abundan en las prolongadas listas de los scouting, yo les tengo un respeto sacro. Porque entran de puntillas en el atrio. Y con el tiempo se quedan con el altar para ellos solos, para que los que le tenemos fe lo adoremos como una de esas divinidades que lo son por su honestidad, autenticidad y entrega. Se hacen pura verdad profesional en sus peleas sobre la hierba. Metiendo la pierna donde más peligro hay. Y apretando los dientes para transmitirle al compañero la pasión de la pelea. Nadie le regaló nada. Se fajó con unos y con otros para quedarse con el sitio que le correspondía. En el campo y en la barriga del estadio. Inoculando el veneno sevillista a los recién llegados. Para que comprendieran que Nervión no es un campo de fútbol. Es la otra catedral donde Sevilla aprendió a ganar y a ser feliz. Él también llevaba, sin ser calorró, sangre de reyes en la palma de su mano. Por eso lo hicieron capitán de la nave almiranta. Lo nombraron jefe de un ejército de ganadores. Y se hizo lágrimas de niño en un cuerpo de cabo gastador tanto en la alegría como en la derrota.

Fue un honor pelear a tu lado. Fue un placer verte cómo, llegara quien llegara, ya fuese técnico de arpillera inspiración o filósofo de barrio, hacerse con un lugar en el equipo, defendiendo tu posición dentro y lejos de la grama. Promedió una media de cuarenta partidos por campeonato. Y goleaba sus seis o siete chícharos por temporada. Además de ir bien por alto, las alturas de las figuritas del belén no lo intimidaban. Me cuentan gente cercana al club que, en un partido trascendental ante el equipo de La Palmera, aquel alemán que trajo Monchi para que pasara el invierno al sol de su absentismo futbolístico, Marko Marin para los anales, tuvo que escucharlo en los vestuarios. A él, a Coke y a Rakitic. Los tres se lo llevaron a un rincón del vestuario. Como en las películas se llevan al chivato de la cárcel para ponerlo al corriente de lo que vale un peine. Y le dieron un repaso de esos que nunca se olvidan. Se nos marcha el capitán lejos de Nervión. Y seguiremos sus pasos como se siguen las peripecias de los camaradas que por su valor y compromiso los llevaron a pelear a otro frente. Suerte, capitán. Fue un honor pelear a tu lado. Por eso el repeluco que me da tu marcha me aconseja, otro año más, a no tomaros cariño. Porque nuestro pobre corazón de hierro se nos va oxidando con tantas penas…

[asturgabriel]

En su despedida, ha dicho que no nació Sevillista, pero morirá cómo Sevillista.

[Corleone]

      No he podido evitar que un lagrimón como un melón baje por mis ya ajadas mejillas...

      ¡Gracias, muchas gracias, Visentet!... ha sido un honor sentirnos representados por tí. Tampoco, como tú mismo has dicho de Óscar Arias, te voy a desear suerte pues las personas decentes como tú no la necesitan, ya que, aún en las derrotas, has sabido comportarte con entereza y tragar saliva como hacen los toros bravos que se tragan su propia sangre y se aculan en tablas presentando pelea hasta el final.

      Una cosa te digo, Visentet... cuando vuelvas al Sevilla, porque volverás sin la menor duda, éste viejo sevillista en el exilio estará en tu presentación ''así me farte pa aseite'', como solemos decir por aquí...

      Aunque yo no tuve la suerte ni el honor de poder defender al Sevilla en el terreno de juego, sí que lo defiendo en el lñugar que me ha correspondido... es decir con el corazón por delante como has hecho tú desde que llegasta al Sevilla FC.

      Adiós, Visentet... vuelve cuando quieras a ésta tu casa.

[Líder Alfaro]

A mi se me han saltado las lágrimas...que pena me da que se vaya.