El Glasgow Rangers es todo un clásico en la máxima competición del Viejo Continente. Los escoceses llevan décadas asentados en la antigua Copa de Europa y en la actual Champions, demostrando que si bien no entran en las quinielas para estar en las rondas finales, siempre se muestran competitivos.
A lo largo de la historia del balompié continental, marcar cuatro o más goles en Ibrox Park siempre ha sido un buen presagio. No obstante, el Sevilla ha sido el cuarto equipo que ha logrado marcar cuatro o más goles al Rangers en su terreno de juego, y en las tres ocasiones anteriores, los vencedores han llegado a la final de la Champions.
En la campaña 1957/1958, el Milan ganó al Rangers en Glasgow 1-5 y acabó llegando a la final del campeonato, no teniendo fortuna en el partido decisivo, donde cayó en la prórroga ante el Real Madrid.
Dos años después, en la temporada 1959/1960, el Eintracht de Frankfurt alemán consiguió el triunfo en Escocia 3-6. Los teutones tuvieron el mismo destino que los italianos, pues también cayeron en la final ante el Real Madrid.
Más recientemente, en la temporada 1995/1996, la Juventus de Turín arrasó en Ibrox, donde ganó 0-4, y sí que consiguió alzarse con el galardón europeo al derrotar en la final al Ajax.
El Glasgow Rangers llevaba 13 años sin recibir un correctivo tan duro en su estadio como el que le infligió el martes el Sevilla, lo cual adquiere aún más mérito al pasar todas las temporadas los mejores equipos europeos por el estadio de Ibrox Park.
Que no se rompan las estadísticas.