Ando algo aburridillo y me ha dado por inaugurar un hilo en el que tratar de los fenómenos más friquis que se recuerdan en el planeta furgolístico.
Hay muchos donde elegir, pero quiero, -con permiso del
señor ué manta, por supuesto-, inaugurar este zarrapastroso hilo con la figura del tío más asesino que haya vestido calzonas y botas de tacos... Ná más y ná menos que el gran ¡¡¡NOBBY STILES!!!.
Imaginarsus al vecino del tercero; ese chaval canijo, topete, feo como ercoñoesumare, esaborío y cabrón, al que le ha dao por querer ser figura del fúrgol a pesar de estar menos dotao para ello que yo para interpretar el papel estelar de una peli de pelo.
Pues ése y no otro fue el calvo, miope y desdentado Nobby Stiles que, a veces, para celebrar un gol o hacer una gracia se quitaba la prótesis dental y sonreía a la grada el muy joputa.
En tós mis años viendo fúrgol no he visto cabrón semejante en un terreno de juego; tenía pinta de mierdecilla al que tós los niños del cole zurraban la badana, pero cuando el escuchimizao Nobby se ponía a la faena de repartir cera no había quien le superase. Y esto en el fúrgol anglocabrón de los 60's, que no se distinguía lo más mínimo por sus exquisiteces y todiós daba y recibía que es un primor.
La especialidad de Nobby era jartar de leña y secar al jugón del equipo rival, al que acojonaba de tal forma que el probesito salía najando ná más verle a menos de dos metros. Pero ni por esas se salvaba el probesito bastardo que le tocase la marca del cabronazo Nobby; le perseguía por tól campo hasta cazarlo y de nada le valía hacerse el lesionao, Nobby iba a por él hasta que le remataba y tenía que salir del campo.
Recuerdo un Arsenal-Manchester allá por el 64 o 65 en el que Nobby endiñó tal somanta de palos a la figura del clú cañonero que en la disputa para ver quien sacaba de banda, el cabronazo
hizo ver que el otro le había empujao por detrás y cayendo le endiñó al pobre desgraciao dos coces en los huevos al mejor estilo de los borricos de la remonta de Rute. A menos de cinco metros de mis ojillos pirris, porque yo estuve allí y lo vi.
Ríanse vuecedes de los más insignes leñeros de nuestro fúrgol; los Campanal, Ovejero, Griffa, Benito, De Felipe, Javi Navarro o Pablo Alfaro, porque comparaos con el cabronazo de Nobby Stiles resultarían ser unas damiselas gazmoñas y acomplejás.