Cada punto que se consiga es inesperado y motivo de fiesta. Esa ha sido mi filosofía desde el principio de temporada y la voy a mantener.
Jamás ha estado el listón tan bajo. Ni el equipo de Marcos Alonso daba tan mala espina
Creo que ya lo comenté una vez por aquí. Los equipos de los descensos de 1997 y de 2000 hasta el final de la primera vuelta no éramos conscientes de lo mal que estábamos. Este año desde el principio se ve que la plantilla no tiene nivel para competir en primera división con un mínimo de garantías.
Solo nos puede salvar echar a los dirigentes que tenemos en la junta de octubre y que en enero venga al menos un fichaje por línea que aporte competitividad.
Hoy con solo ver la alineación se sabía que perdíamos con total seguridad.