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#Alavés vs. S.F.C.
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Me ha gustado mucho, como casi todo lo que te leo. ¿Animar sin parar? Sí, si el equipo se lo gana con su actitud en el campo. Pero a la salida bronca, mucha bronca: El jugador debe saber qué camiseta es la que se pone, que deshonrarla e irse de rositas en este santuario no van de la mano. Debe saber que si no mete el pie aquí no lo queremos por muy bueno que sea.Y otra cosa, yo creo que el ratoncito sale fácil. Lo que ya no tengo tan claro es qué va a pasar cuando se haga mayor. A mí más que ésta lo que me está preocupando desde hace meses son las dos próximas temporadas. Aún acertando los dirigentes en un 90% en sus futuras decisiones no lo veo claro, al ratoncito se le ha maltratado bastante y recuperarse no le será fácil.
Gracias por tu comentario.Somos soberanos. Somos la afición del Sevilla F.C. entidad más que centenaria.Que cada uno haga lo que crea conveniente hacer. Yo lo respetaré como he hecho siempre.Yo animaré al equipo como nunca. Hasta la saciedad.Espero que sepas respetar mi decisión.Un saludo
Lo lógico seria, en aficionados que piensan como yo, pañolada antes del partido, animar al equipo durante el mismo, y aunque ganemos por goleada, pedir el cese de MJ al final del encuentro
La desesperanza aprendida es una suerte de convicción, presente en algunas personas, de que no es posible modificar la realidad y que, independientemente de las acciones que emprendan para cambiarla, las cosas se quedarán como están.Cual liebre ante los faros de un coche, el inmovilismo se ha apoderado de la Entidad. Simplemente un paseo por internet y los blogueros se han llenado de spam de indefensión aprendida. Los flautistas no soplan los agujeros y los ratoncitos se les ahogan en los tazones de leche.... no sabemos exactamente que hacer para solucionar la depresión en la que se encuentra el equipo pero somos soberanos. Somos la afición del Sevilla F.C.Y tomando las riendas de las circunstancias y considerando que de nosotros depende lo que se pueda lograr, ante la desesperanza aprendida que rodea el club, nos enfrentaremos más positivamente a la actual situación. Yo animaré al equipo como nunca. Hasta la saciedad. Hasta conseguir salir del tazón de leche. Otra cosa es lo que haré cuando salga ...
Yo he expuesto mi pensamiento en otro hilo creado anterior a este y casi de igual contenido, pero no centrandome como tu en la figura de MJ, si no mirando más arriba.http://www.forooficialsfc.com/index.php?topic=2233.msg128761#msg128761
Dos ratoncitos cayeron en un tazón de leche. Uno decía que ya conocía la situación y que era imposible salir del tazón. No luchó por salir y se ahogó. El otro no sabía que hacer, pero al contrario que el otro ratoncito, luchó y se batió tanto en el cazón del leche, que la convirtió en mantequilla, se sentó en ella, pudo respirar y se salvó.La desesperanza aprendida es una suerte de convicción, presente en algunas personas, de que no es posible modificar la realidad y que, independientemente de las acciones que emprendan para cambiarla, las cosas se quedarán como están.Cuando, por un motivo u otro, la persona sufre varios fracasos continuos en una misma lucha, hace que se vaya agotando su energía para volver a intentarlo.Cual liebre ante los faros de un coche, el inmovilismo se ha apoderado de la Entidad. Simplemente un paseo por internet y los blogueros se han llenado de spam de indefensión aprendida. Los flautistas no soplan los agujeros y los ratoncitos se les ahogan en los tazones de leche.Al igual que ese ratoncito que sin saber que hacer no dejo de batir las patas hasta convertir la leche en mantequilla no sabemos exactamente que hacer para solucionar la depresión en la que se encuentra el equipo pero somos soberanos. Somos la afición del Sevilla F.C.Y tomando las riendas de las circunstancias y considerando que de nosotros depende lo que se pueda lograr, ante la desesperanza aprendida que rodea el club, nos enfrentaremos más positivamente a la actual situación. Yo animaré al equipo como nunca. Hasta la saciedad. Hasta conseguir salir del tazón de leche. Otra cosa es lo que haré cuando salga ...
Magnífico escrito, estamos en la onda.No es nuevo por mi parte anunciar que, a título individual, cuando el equipo salte al campo mi bronca será de órdago (sólo en estas ocasiones siento el no tener el abono en banco de pista de preferencia para que me escuchen mejor).Estos jugadores y este entrenador me toman el pelo -así lo considero, no hablo por los demás- y como sevillista (ni siquiera hablo como cliente después de gastar en casa más de 1.000 € en el Sevilla en lo que va de temporada), sólo como sevillista que quiere lo mejor para su club, ese "lo mejor" pasa por una imprescindible bronca a esta patulea de profesionales que han pisoteado la camiseta del Sevilla en tantos partidos mientras a final de mes cobran con puntualidad sus millonarias soldadas.Terminará mi bronca -ni himno ni zarandajas varias- cuando el árbitro pite el comienzo del partido, porque mi hijo ya se habrá enterado de lo que le conviene y cuando se ha puesto manos a la obra siempre lo animaré, pero lo que no haré nunca será callar ante la ineptitud consentida, tolerada y excusada.Si desde niño soñaba cuando perdíamos 4-1 en el Bernabéu a falta de cinco minutos (o en Balaídos jugando en Segunda cuando había que esperar a los martes para que "polideportivo" dirigido por José María Casanovas diera el resumen de aquellos partidos con el Baracaldo o el Sabadell) que el Sevilla era el único equipo del mundo capaz de remontar en ese tiempo y en el descuento... ¿Qué no pensaré ahora como para siquiera imaginar el tirar la toalla?Lo único que me retrae de este planteamiento y que incluso a ratos me hace dudar de mi presencia en el estadio, es que sobre el césped estarán representados tan solo unos porcentajes de la responsabilidad, la otra está en el palco, donde no se meten los goles pero donde algunos sí determinan que se serigrafíen imágenes de alguien para montarse en los autobuses donde viajan los que meten los goles.También mi bronca iría dedicado a ellos, pero temo -y eso me dolería- que aquellos que deseen manifestar su disgusto sólo tengan ojos para quienes comparezcan en el banquillo o terreno de juegos, a estas alturas aún me temo eso, y eso, de darse, es profundamente injusto.
Es que para que cesen a MJ hay que mirar, por narices, mas arriba
También mi bronca iría dedicado a ellos, pero temo -y eso me dolería- que aquellos que deseen manifestar su disgusto sólo tengan ojos para quienes comparezcan en el banquillo o terreno de juegos, a estas alturas aún me temo eso, y eso, de darse, es profundamente injusto.
Si, pero si lo que se escucha es "Jimenez vete ya" los que toman las decisiones pueden coger el camino fácil, y sin darse por aludidos, seguir igual.Algo tiene que cambiar, nos hemos acomodado. Todos.
No es nuevo por mi parte anunciar que, a título individual, cuando el equipo salte al campo mi bronca será de órdago (sólo en estas ocasiones siento el no tener el abono en banco de pista de preferencia para que me escuchen mejor).Terminará mi bronca -ni himno ni zarandajas varias- cuando el árbitro pite el comienzo del partido, porque mi hijo ya se habrá enterado de lo que le conviene y cuando se ha puesto manos a la obra siempre lo animaré, pero lo que no haré nunca será callar ante la ineptitud consentida, tolerada y excusada.Lo único que me retrae de este planteamiento y que incluso a ratos me hace dudar de mi presencia en el estadio, es que sobre el césped estarán representados tan solo unos porcentajes de la responsabilidad, la otra está en el palco, donde no se meten los goles pero donde algunos sí determinan que se serigrafíen imágenes de alguien para montarse en los autobuses donde viajan los que meten los goles.
Pero ¿De verdad piensas que esa actitud va a cambiar el inmovilismo establecido?
O sea, que yo creo que lo que tú llamas inmovilismo debe de agrietarse con cosas así.