Como las ocasiones hay que vestirlas, llegué a Barcelona con la camiseta de la final de la Supercopa frente al Milán, después de haber dormido en el Trenhotel con una camiseta del tipo que se usaba en los 70, cuando Biri Biri. Por la tarde para el partido, la de la Supercopa que le ganamos al Barça, que no podía fallar. Y la vuelta en el AVE, con la 2ª equipación de la temporada, la de los pueblos de Andalucía.
¡ Qué manera de disfrutar y qué bonita es Barcelona !