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#Alavés vs. S.F.C.
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Que este Sevilla de la segunda década del siglo XXI poco tendrá que ver en lo deportivo con lo recientemente visto es algo que no escapa a nadie. No incidiré en el cambio de ciclo del equipo porque ya de sobra está hablado y recalcado por el Presidente y corroborado con los hechos como la incorporación a nuestro banquillo de un técnico cuya personalidad poco tiene que ver con los tres timoratos inquilinos que le precedieron o como la salida de mitos nervionenses y entradas de jóvenes futbolistas con hambreAhora quiero hablar del otro cambio de ciclo que se está produciendo en la institución. De esa metamorfosis que pasa más desapercibida y que, poco a poco, se está produciendo en el club. Un cambio de timón poco ruidoso, que se está realizando paulatinamente y sin estridencias y que buscan dar un nuevo enfoque exterior a nuestra imagen.En el fútbol, cuando ganas, ganas y sólo sabes ganar, el resto de cosas no es que pasen a ser secundarias; es que prácticamente no existen. Si la pelotita entra todo lo demás carece de importancia. El que Kanouté la ponga dos cms. más p'allá y que el balon entre en lugar de dar el palo puede hacer que una serie de cosas pasen de estar mal a bien hechas o viceversa. La terrible y simple ley del fútbol. Pero ahora, que de un tiempo a esta parte le pelotita no entra con tanta asiduidad, denoto como desde el club se está empezando a plantear y reflexionar sobre ciertos detalles que algunos siempre hemos cuestionado.Ya desde el año pasado, se atisba un nuevo giro en la política del club. Si en algo están de acuerdo los más mal-llamados oficialistas y los más mal-llamados críticos es que el Sevilla transmite una imagen hacia el exterior, cuando menos, áspera. El cierre en banda indiscriminado, la falta de autocrítica total, el enfrentamiento continuo con Medios de Comunicación sevillanos, capitalinos o de de cualquiera que ose decir cualquier chuminá contra el Sevilla, el tema del polémico delegado de campo, el aplauso incluso de la violencia por empleados del club (recordemos la célebre pachuquiña...), y un largo etc son cosas que, si de verdad queremos un cambio de ciclo y un renovadísimo Sevilla 2011-12 carecen de fundamento. Y nuestro Presidente, tío grande, listo e inteligente como pocos, así lo ha visto.No me centraré en todos y cada uno de los detalles que atisban la dulcificación del Sevilla, porque la cosa se viene mascando poco a poco, pero sí en algunos relevantes. Así, nuestros Medel y Rakitic particular es Antonio Oliver. Bocanada de aire fresco y conductor de un magnífico programa en una radio oficial donde el sectarismo y el servilismo campaba a sus anchas. Por otro lado, el Sevilla ha anunciado el fichaje de un excelso y reconocido profesional como Juanma Avila el cual, además, para más inri es el Presidente de la Asociación de la Prensa Deportiva Sevillana. Más acercamiento con los MMCC, imposible. Y por último (por ahora) la salida del club de un personaje polémico como Cristóbal. Y lo que se rumorea puede ser lo siguiente en forma de envío a la venta de cierto personaje para desgracia y posible suicidio de nuestro pajarraco preferido.¿Las causas de todo esta evidente edulcoración? He escuchado en más de un sitio que lo de la Sentencia en el caso Minutas tiene mucho que ver y que el Sevilla está preparando el terreno de cara a los próximos y durísimos meses. Quienes piensan así están, a mi modo de ver, radicalmente errados. Para mí lo que está pasando se resume simple y llanamente en que el giro del Sevilla 2011 es tan profundo que la institución se está reinventando en todas sus facetas. El cambio de una cosa sin la otra queda coja. Así de simple.Foreemos, hamijos.
Para mí lo que está pasando se resume simple y llanamente en que el giro del Sevilla 2011 es tan profundo que la institución se está reinventando en todas sus facetas. El cambio de una cosa sin la otra queda coja. Así de simple.Foreemos, hamijos.
De los enemigos lo único que quiero es el miedo.La dulcificación y otras blandopolleces no sirven absolutamente de nada frente a los que quieren, con pertinaz dedicación, nuestra simple desaparición.
Y a Spahic donde lometemos en todo esto?