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#Alavés vs. S.F.C.
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El verano visual está genial, el verano anímico está como la plantilla del SFC para la temporada 2010-2011, bajo mínimos.
Mira, Reed, y voy a resumirlo (dentro de lo que es un resumen para nosotros,JOjOjoJojOjoJojOjo) porque no tengo mucho tiempo.El salto de calidad y de competitividad del Sevilla te repito que viene por los cuatro cracks que hemos tenido en estos años arriba. Puerta-Adriano-Capel-Perotti-Kanouté-Luis Fabiano-Saviola-Navas, total nada. Obviamente han estado acompañados de otros buenos jugadores que en algunos momentos han podido ser hasta decisivos.Pero no te equivoques, este fue en su momento el gran acierto de la gestión de Monchi y Del Nido: la búsqueda de la pegada por encima de todo lo demás. Es lo que diferencia a un equipo grande de uno pequeño, a un equipo aspirante de otro mediocre, a un campeón de un mero comparsa.Como se ha demostrado después, en la época de Manolito el torturador, esa pegada puede ir acompañada de una propuesta de juego coherente, vistosa, trabajada, o de un esperpento futbolístico como el que contemplábamos domingo sí, domingo también, mientras Jiménez estuvo en el banquillo. A los cuatro cracks les puede acompañar Poulsen, Renato, Keita y ALves; o Mosquera, Duscher, Romaric, y Lolo; o Maresca, Martí, Jordi y David. Eso sí, siempre con un enorme Palop atrás.Los resultados no varían radicalmente, incluso teniendo a un inepto absoluto como el de Arahal sentado en el banco. Varío el sistema, varió la concepción del juego, variaron los nombres de los acompañantes, pero seguimos metiéndonos o rozando la champions, y merodeando finales y semifinales. No me hables de partidos puntuales, porque entonces tendríamos que analizar todas y cada una de las variables que intervienen en el juego: el papel de cada uno de los jugadores en cada jugada, en cada minuto del encuentro, viendo como influían con sus movimientos en el lucimiento del destacado, o como le pellizcaba los huevos por lo bajini a su marcador para distraerlo, o incluso si la papilla de Escribano de ese día llevaba frutas hipervitaminadas por una concentración anormal de abonos y una sobreexposición solar que las convirtió en una bomba energética.Visión de conjunto, que le llaman al asunto. Y te digo que el único nexo entre todos los equipos que hemos tenido en estos años de gloria son la aparición constante sobre el césped de cuatro cracks para esas posiciones más adelantadas (delanteros y extremos) y de un porterazo salvando los fallos que cometía el resto. Cuando algunos de estos cinco han estornudado, el Sevilla ha cogido una pulmonía.Por otro lado, y atacando al tema de los nombres en concreto de los enormes pifiazos de Monchi te diré que yo solo puedo hablar por mí. Las operaciones de Perotti o Fazio o Pouga o Valiente o... siempre me parecerán bien. Es más, tal y como comento en este hilo, al haber bajado los megapoderosos el umbral de edad para encontrar cracks, resulta lógico que equipos como el nuestro deban ejercer casi de asaltacunas en lo que a descubrimiento de talentos se refiere. Por eso no entiendo tanta parabólica y tanta tele en las labores de scouting. El espectro de jugadores donde ahora debería trabajar de lleno la secretaría técnica sevillista no salen en gol TV. Esos los "descubre" cualquier aficionado con tiempo, gusto, y una conexión a internet. Pero claro, para traer a chavales tan jóvenes hay que tener unas infraestructuras que el Sevilla no posee. ¿Por falta de presupuesto? Pues no creo. Simplemente porque el consejero responsable de la parcela deportiva del club no cree en este sistema de trabajo. Vive ya demasiado presionado por el objetivo, por el siguiente resultado, debiendo repartir el tiempo entre sus rezos, sus chirigotas, su palabrería excusadora ante los medios y, supongo, las tareas propias de su cargo. Y así andamos, pagando "posibles descubrimientos" como Konko o Acosta o Mosquera o... a precio de pelotero contrastado. Y así se nos queda el monedero: ni para pipas en una temporada en la que volveremos a disputar la champions.No me pongas a tirar de foro, porque solo me siento identificado con esa "generalidad" de la que hablas en dos casos: la minusvaloración de Kanouté (y nunca discutí su técnica) y las buenas expectativas sobre Koné (aunque tampoco estuviera muy de acuerdo con el precio que se pagó por él). Del la aprobación al resto de bultos me desmarco. Y podría añadir el nombre de muchos futbolistas sobre los que hice reseña en su momento (cuando eran semidesconocidos o su precio no resultaba prohibitivo), como Garay, Pastore, Ramires, Pepe, Yaya Touré, Song, etc... que bien compensarían esos errores.Aún así, esto resulta de todo punto irrelevante. Ni yo, ni niguno de los integrantes del foro cobramos por realizar ese trabajo. Ni tenemos una infraestructura ni un presupuesto como el que maneja Monchirigotero para ejercer su labor. Ni, obviamente, tenemos peso alguno en las decisiones que toma el consejo. Esto sí que es demagogia, amigo, comparar las opiniones de unos aficionados que se mueven a golpe de sentimiento y corazón, con la responsabilidad que corresponde a un profesional casi mediático generosamente remunerado.Aparte de todo, veo que hay cosas de la intrahistoria sevillista de los últimos años que desconoces. Y bueno, he dicho que iba a "resumir", pero el tema Kerzhakov-Koné no va así. Pero tampoco comprendo que los asimiles cuando el ruso venía a aportar lo que Chevantón nunca aportó, y Koné era un recambio para Kanouté con posibilidad de arrancar desde la banda hacia adentro. Nombres de los fiascos. Chevantón dio en la primera división italiana una buena temporada en un equipo "contraatacante" que jugaba para él. La otra fue en la serie B. Y allí ya se lesionaba. Y en Mónaco estaba más tiempo lesionado que jugando. Te lo repito: apuesta y error. En su mismo momento había un tal Villa que pasó del Zaragoza al Valencia por 12 kilos y una ficha ridícula (se la subieron 5 veces en tres años), mientras que nuestro paquete Uruguayo nos costó más de nueve kilos y cobraba (y cobra) casi dos millones por temporada. Gran operación y grandes informes no ya de la valía futbolística de ambos, sino sobre la profesionalidad de nuestro disoluto vividor besaescudos.Acosta. Ni era ni titular en su equipo, ni era titular en las categorías inferiores de la albiceleste. Nunca tuvo gol. Seguía la liga argentina, y jamás me llamó la atención. Otorguémosle la categoría de proyecto prometedor de jugador. Y su fichaje simplemente obedeció al deseo de Jiménez de tener a alguien rápido en la delantera para jugar a la contra con el equipo metido bien atrás. ¿Tenía claro nuestro chirigotero como debería jugar el Sevilla?¿Mordiendo adelante y llegando rápido por banda?¿Con toque y pausa?¿Al puro y duro contrataque regalando el balón al contrario?¿Al voleón y tente tieso y a ver qué sale? Cada fichaje ha supuesto un bandazo. Una apuesta indistinta por un tipo de juego y el contrario. Y al final te encuentras con montón de futbolistas a contrapelo, tratando de cumplir misiones para las que no están dotados, y sin saber muy bien a qué demonios juega este club. Ay, Acosta...El responsable de la parcela deportiva no sabe a dónde va. No tiene hecho un auténtico trabajo de planificación. No sabe qué Sevilla está construyendo de cara a los próximos 10 años. No puedes apostar del mismo modo por Juande y por Jiménez. No puedes fichar para la misma posición a Keita, Cigarini y a Romaric. No puedes dejar huérfana de canteranos la primera plantilla y después pedir que te salven los muebles cuando la cosa pinta mal. La parcela deportiva del club no tiene un rumbo fijo, se limita a sobrevivir a base de resultados. Unos resultados que se cimentan en una época de aciertos más o menos casuales, con los que se conformó una columna vertebral de ensueño, que todavía sigue tirando del carro por ser una casta insuperable de ganadores.Y te repito que meter a los fichajes de este año en el grupo de los aciertos solo obedece al mundo de tus deseos. Ojalá salgan buenos tan solo la mitad de los que han llegado y/o resten por llegar. Pero para leer novelas de ciencia ficción prefiero a Robert A. Heinlein, y como futurólogo me río más con Raphel. Ya veremos lo que sucede. Es inútil dedicarse a profetizar cuando la competición pondrá a cada uno en su lugar. Además a Monchi no se le critica por estas incorporaciones, por más que alguna pueda suscitar incognitas que el tiempo se encargará de resolver. La responsabilidad de Monchi en lo que se refiere a esta campaña de fichajes se circunscribe a haber dejado la caja como un solar, dilapidando nuestros posibles para invertir en jugadores de trayectoria más contrastada, y siendo incapaz de desprenderse de toda esa pléyade de bultos, tullidos y golfos que, aparte del brutal desembolso inicial por su fichaje, siguen consumiendo nuestros recursos una temporada tras otra sin que se atisbe solución posible. Esto supone que el Sevilla pierda por la cara un 20-25% del potencial que podría presentar de acuerdo a su presupuesto. Ya ves, de aquellos polvos, estos lodos. Ya no valen para encubrir esta catastrófica gestión ni las furibundas campañas del talibán al frente de los medios del club. La gente tiene ojos. Chevantón es un paquete, Mosquera era un bulto con ojos, Konko es un sinvergüenza, Romaric un golfo de los gordos, Duscher es limitadísimo, Acostá es un bluff minusvalido, Negredo un jugador sobrevalorado pagado a precio de oro, a Manolito se lo rifan para los banquillos de media europa, y Orta va a acabar de asesor en la planta de deportes del Corte Inglés. Y no sigo porque me caliento... El problema no es si los jugadores no progresan si no juegan. Es que se eligió a un entrenador al que le espantaban las rotaciones. Es que se escogieron futbolistas sin la suficiente preparación/fortaleza psicológica para jugar (o no jugar) en un grande. Y por el precio que se pagó por ellos esa caractarística entraba en los mínimos exigibles. Y todavía tendrán el valor de hablar de las concienzudas labores de seguimiento realizadas. Y los pájaros maman...Y lo peor dentro de su labor en torno a los fichajes ha sido la dificultad presentada para diagnosticar y poner coto a las carencias que iba presentando el plantel en cada momento. Ha dejado deliberadamente esta plantilla sin un lateral zurdo, sin un medio organizador, sin un central de jerarquía, o en este verano, sin un sustituto de nivel para uno de nuestros activos más importantes en ataque, Frederic Kanouté, que cualquier día se acabará.Demasiados errores, Reed, demasiado dinero tirado a la basura, demasiados problemas por resolver, demasiados bandazos, y poca perspectivas de que se vaya a enderezar el rumbo. Hubo un tiempo en el que consideré a Monchi como el elemento más intocable dentro del organigrama del club, por encima incluso de Del Nido o de Jose María Cruz. Él solito se ha encargado de dilapidar su crédito. Ha demostrado su ineptitud para llevar las riendas de una entidad grandecita como la nuestra en materia deportiva. Ascendió a consejero y comenzó el descontrol. No ha evolucionado de acuerdo a los tiempos y a los nuevos métodos de los clubes más punteros. Nuestra secretaría técnica crece y engorda a base de nombres, asesores, y técnicos, pero sus resultados son inversamente proporcionales a ese crecimiento. No se está trabajando bien, y la prueba está en esa columna vertebral envejecida y cada vez con mayor responsabilidad si cabe. Y en esa caja vacía que nos obligará a desprendernos de nuestros jugadores más pujantes para lanzar otra moneda al aire de las urgencias, a ver si nos sale otro poker de artistas para construir otro espinazo. Mientras tanto, rezamos con la mirada perdida, a todos los santos que conocemos, en la grada del Almería de turno, a ver si un chaval inexperto nos mete en el último segundo del campeonato nuevamente en champions. O no.Un saludo.P.D. Al carajo lo de la capacidad de síntesis. Donde no hay, no se puede rascar.
Mira, Reed, y voy a resumirlo (dentro de lo que es un resumen para nosotros,JOjOjoJojOjoJojOjo) porque no tengo mucho tiempo.El salto de calidad y de competitividad del Sevilla te repito que viene por los cuatro cracks que hemos tenido en estos años arriba. Puerta-Adriano-Capel-Perotti-Kanouté-Luis Fabiano-Saviola-Navas ¿Cuatro? , total nada. Obviamente han estado acompañados de otros buenos jugadores que en algunos momentos han podido ser hasta decisivos.Pero no te equivoques, este fue en su momento el gran acierto de la gestión de Monchi y Del Nido: la búsqueda de la pegada ¿Alguno aparte de Fabiano, y tampoco tanto, tenia o traia la vitola de jugador con pegada? por encima de todo lo demás. Es lo que diferencia a un equipo grande de uno pequeño, a un equipo aspirante de otro mediocre, a un campeón de un mero comparsa.Como se ha demostrado después, en la época de Manolito el torturador, esa pegada puede ir acompañada de una propuesta de juego coherente, vistosa, trabajada, o de un esperpento futbolístico como el que contemplábamos domingo sí, domingo también, mientras Jiménez estuvo en el banquillo. A los cuatro cracks les puede acompañar Poulsen, Renato, Keita y ALves; o Mosquera, Duscher, Romaric, y Lolo; o Maresca, Martí, Jordi y David. Eso sí, siempre con un enorme Palop atrás. Al que no debemos olvidar apuntar como acierto, añadiendole a Maresca que lo hemos olvidado en los "CUATRO" de la pegada, asi como Javi Navarro sosten de nuestro vigor defensivo y central nada mediocre al que el zoquete de Aragones llevo a la seleccion.Los resultados no varían radicalmente, incluso teniendo a un inepto absoluto como el de Arahal sentado en el banco. Varío el sistema, varió la concepción del juego, variaron los nombres de los acompañantes, pero seguimos metiéndonos o rozando la champions, y merodeando finales y semifinales. ¿Siendo tan facil como es que no lo hacen todos?